lunes, 8 de febrero de 2010

After the rain.

Desperté. El constante repiqueteo de la ventana hizo que me levantara de mi cama y observara el paisaje. Me encantaba oír como llovia. ¡Me sentia tan bien! Era como si nadie existiera en aquel momento. Miré hacia abajo. Pude ver como la poca gente que habia a esas horas de la noche en la calle se escondia en los portales del barrio. Entre toda la gente destacó una persona, que me saludaba feliz desde allí abajo.
"No puede ser..." pensé. "Es imposible que ÉL este ahi en este mismo instante...es imposible"
Pero claramente estaba ahi, saludandome con esa sonrisa suya que tanto me gusta. Me froté los ojos, seguro que eran cosas mias. La obsesión estaba llegando demasiado lejos. En efecto, al abrir los ojos de nuevo ya no estaba.

[...][...]

Dormí demasiado poco aquella noche. Caminaba como un zombie por la calle, con el paraguas en mano. Seguia lloviendo. El tiempo en esta ciudad es claramente una mierda. Lo fue en aquel momento y siempre lo será. Mientras mis pies se quedaban completamente mojados por los charcos por los cuales pasaba sin que me importara, pasé por delante de un escaparate. Otra vez ÉL. Volví a pasar de nuevo, cuando el susto se me pasó. Nada. Completamente nada.
"¿Que narices pasa aqui?"
Y así varias veces. ÉL estaba en todos los sitios por los cuales yo pasaba. Me sonreia, me saludaba, me llamaba a gritos, me intentaba alcanzar, pero no podia. Cerré los ojos y seguí caminando.
"Es una visión, es una visión..." me repetía.
Finalmente, te vi en un banco sentado, con los auriculares puestos. Sonreiste y limpiaste el banco para que me sentara, que estaba mojado. Esta vez era de verdad. Era ÉL de verdad. No lloré ni chillé. No le dije que lo amaba ni que era lo más importante para mi. Simplemente me senté y dejé que echaramos unas risas juntos. Y de pronto...

Abrí los ojos.
Otra vez en mi cama, oyendo como la lluvia hacia ruido en mi ventana. Maldecí los sueños, y le maldecí a ÉL por estar siempre presente en ellos.

domingo, 7 de febrero de 2010

Impulsos


Si esque a veces te dan ganas de mandar a tomar por culo a todo el mundo. Te dan ganas de subirte a la mesa de tu clase y chillar. Chillar todo lo que tienes dentro y que nadie te mire raro por ello. Tienes ganas de decirle a todos lo mucho que odias su existencia y lo poco que te gusta compartir todo el dia con ellos. Quieres llegar a casa y decirle a tus padres que tienes ganas de tener ya los 18 años para irte ya de casa y que nadie te mande en esta vida. Tienes ganas de coger a las personas que te han amargado y amargarles ahora a ellos. Y sobretodo, tienes ganas de coger tu movil y marcar el número de la persona más importante para ti, para decirle que lo único que te mantiene en pie y te hace seguir adelante...es él mismo.

And my eyes are screaming for the sight of you
And tonight I'm dreaming
Of all the things that we've been through
And I can't hold on to you, so I guess I feel lonely too.

Secondhand Serenade - Suppose.

jueves, 28 de enero de 2010

Vete de mi vida. Te lo exijo.

¡AHORA MISMO!

A las 9 y 17 de la noche, pienso.

Te echo de menos. Me faltas. Te necesito.
Siempre he pensado que si tu estuvieras en mi vida, todo seria mas fácil. Pero, para que engañarme, seguro que encontrarias una excusa perfecta para no estar conmigo y irte con las guapas, las ricas y las delgaditas.
O a lo mejor me querrias, al principio. Luego me utilizarias y te irias con ellas de nuevo. Porque asi es como te ven.
¿Como serás en realidad?
¿Eres tan simpatico, amable, buena persona y perfecto como en mis multiples sueños?
¿O eres una farsa?
Pero, ¿sabes que? Me da igual ya lo que seas. Total, ¿para que sufrir por alguien que ni siquiera entiende tu idioma? Con verte a unos metros de mi ya soy feliz. No sé si esto algun dia me pasará factura. Pero esque ya realmente me da igual todo.
¿Como es que me he vuelto tan pasota?, te preguntarás.
Perdona, pero ya te lo he dicho.
Porque te echo de menos, me faltas y te necesito.

miércoles, 27 de enero de 2010

Lo sensual divierte.

Primero la gorra, seguido de la cinta. Después, lentamente la camiseta, dejandola por los suelos. Te sacas los zapatos de una manera cómica y haces que me ria. Te bajas la bragueta y me empiezo a ruborizar. Tus pantalones se pierden, ¿donde estan?. Te quedas encima mio, sonries lascivo y me preguntas quien te sacara la última prenda.

Asesino.

Querido diaro, querida persona que lea esto, querido desconocido: ¿No te han dado nunca ganas de matar a alguien?
Si, seguro que ahora estaras pensando "Pero que bestia de chica! ¿Como puede pensar esto?" Pero no tengo miedo de lo que podrás decirme. Sé que en el fondo de tu corazón, de tu alma, tienes a un pequeño asesino con ganas de matar a la persona que te hace sufrir. No hace falta que la manera de matar sea con cuchillos, cuerdas, hachas o lo que se te pase por tu enferma cabeza. Con unas simples palabras puedes matar a alguien sin necesidad de tocarle.
¿Como sé todo esto?

Porque fui victima de la mente asesina de la persona que mas queria en este mundo. Me asesinó con pocas palabras. Supongo que ahora soy un muerto viviente.
Que guay. Podré salir en algun remake de Trhiller de Michael Jackson.